Cambio climático: liderando el futuro sostenible

En la última década, el cambio climático ha dejado de ser una preocupación distante y teórica para convertirse en una realidad tangible que afecta cada aspecto de nuestras vidas. Desde la Unión Europea hasta las comunidades locales en España, el impacto del cambio climático es innegable.

La importancia de abordar este desafío de manera urgente y efectiva se ha vuelto crucial, no solo para salvaguardar nuestro planeta, sino también para forjar un futuro sostenible para las generaciones venideras.

En este blog, exploraremos la intersección entre el cambio climático, la responsabilidad empresarial y la necesidad de alinear los valores personales con las prácticas corporativas. Basándonos en el informe “Special Eurobarometer 538: Climate Change”, consideraremos la preocupación pública por el cambio climático, la respuesta de la Unión Europea y España, así como la importancia de que las organizaciones adopten prácticas sostenibles y cumplan con los criterios ESG (ambientales, sociales y de gobernanza) en su misión de construir un mundo más verde y equitativo.

El cambio climático: un desafío ineludible

Es un hecho innegable que más del 77% de los ciudadanos de la Unión Europea considera el cambio climático como un problema gravísimo en la actualidad. Esta cifra revela una conciencia pública creciente sobre la gravedad de la situación. Las temperaturas globales en aumento, los patrones climáticos erráticos y los eventos climáticos extremos están presentes en nuestras vidas cotidianas, sirviendo como recordatorio constante de la urgencia de abordar el cambio climático.

La opinión pública también está clara sobre la responsabilidad compartida para enfrentar este desafío. La Unión Europea, los gobiernos nacionales, la industria y las organizaciones son vistos como actores clave para abordar el cambio climático. Más de la mitad de los encuestados (56%) considera que la UE tiene un papel fundamental en este esfuerzo, mientras que un porcentaje similar (56%) espera que los gobiernos nacionales también tomen medidas. Sin embargo, es relevante notar que un 35% se considera a sí mismo personalmente responsable, lo que subraya la creciente conciencia sobre el papel individual en la lucha contra el cambio climático.

La respuesta de la Unión Europea: compromiso y acción

La Unión Europea ha asumido un papel de liderazgo en la lucha contra el cambio climático, con una serie de medidas ambiciosas para mitigar el calentamiento global. En un mundo donde la temperatura promedio ha aumentado de manera significativa desde la Revolución Industrial, la UE trabaja incansablemente para mantener el aumento de la temperatura global por debajo de 2°C en comparación con los niveles preindustriales. Estos esfuerzos son fundamentales, considerando que los últimos diez años han sido la década más cálida jamás registrada.

Las acciones de la UE tienen una base sólida en la realidad. En 2022, Europa experimentó su segundo año más cálido y su verano más caluroso registrado. Estos cambios se atribuyen en gran parte al aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero producto de la actividad humana, ya que la temperatura global actualmente supera en 0.94°C – 1.03°C a los niveles de fines del siglo XIX. Los científicos advierten que sobrepasar el umbral de 2°C tendría consecuencias catastróficas para el clima y el medio ambiente, lo que hace que la misión de la UE sea aún más crítica.

Te puede interesar: Directiva de Sostenibilidad Empresarial UE

El compromiso de España: enfrentando el cambio climático en la Península Ibérica

España, como país miembro de la Unión Europea, ha asumido su compromiso en la lucha contra el cambio climático. La nación ibérica ha experimentado en carne propia los impactos del cambio climático, desde el aumento de las temperaturas hasta la creciente amenaza de la desertificación y los riesgos de inundaciones. España ha reconocido la necesidad de adoptar medidas proactivas y alineadas con los objetivos climáticos globales para salvaguardar su tierra y su gente.

El compromiso de España se refleja en su participación en las negociaciones internacionales sobre el cambio climático y su adhesión al Acuerdo de París. La nación ha implementado medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, así como promover el uso de energías renovables y la eficiencia energética. Desde la industria hasta la sociedad civil, España está tomando medidas para garantizar un futuro más sostenible.

El rol de las organizaciones en la transformación sostenible

El sector empresarial juega un papel crítico en la lucha contra el cambio climático. Más de la mitad de los ciudadanos europeos (53%) considera que las organizaciones tienen la responsabilidad de abordar este desafío. Esta percepción no solo es una llamada a la acción, sino también una oportunidad para que las organizaciones adopten prácticas sostenibles y se conviertan en agentes de cambio.

En este contexto, los criterios ESG han emergido como un marco integral para evaluar la responsabilidad empresarial. La consideración de factores ambientales, sociales y de gobernanza en las operaciones y decisiones empresariales no solo contribuye a la lucha contra el cambio climático, sino que también atrae y retiene a empleados comprometidos. Las personas buscan formar parte de organizaciones cuyos valores y propósito estén alineados con la sostenibilidad.

La transformación empresarial y el camino hacia la sostenibilidad

La urgencia de actuar se hace aún más evidente al considerar el contexto actual. Más del 58% de los ciudadanos europeos considera crucial acelerar la transición hacia una economía verde. Esta necesidad se vuelve más apremiante considerando los aumentos en los precios de la energía y las restricciones en el suministro de gas debido a factores externos. Las organizaciones están llamadas a liderar esta transformación al adoptar energías renovables, mejorar la eficiencia energética y promover prácticas sostenibles en todos los niveles de su operación.

Los esfuerzos de la Unión Europea están dando frutos. Desde 2008, la UE se ha comprometido a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y ha logrado reducciones notables. El Pacto Verde Europeo establece un ambicioso objetivo de alcanzar emisiones netas cero para 2050, lo que inspira a las organizaciones a reconsiderar sus procesos y modelos de negocio en línea con la economía circular, la reducción de residuos y la promoción de la biodiversidad.

También te recomendamos: Sostenibilidad Corporativa: una obligación para el 2024

Un futuro sostenible a nuestro alcance

En este punto, es evidente que la acción es imperativa. Las organizaciones deben abrazar la transformación hacia un futuro sostenible, no solo por responsabilidad, sino también por oportunidad. La adopción de prácticas empresariales sostenibles no solo contribuye a la lucha contra el cambio climático, sino que también mejora la competitividad y el atractivo de las organizaciones. Las personas desean formar parte de organizaciones que lideren con valores y propósitos alineados con la sostenibilidad.

En conclusión, el cambio climático es un desafío urgente y real que exige una respuesta a nivel individual y colectivo. España y la Unión Europea están tomando medidas concretas para abordar este problema, pero el sector empresarial también debe asumir su responsabilidad. Al cumplir con los criterios ESG y abrazar prácticas empresariales sostenibles, las organizaciones pueden ser impulsores del cambio en la lucha contra el cambio climático. El momento de actuar es ahora, y las decisiones que se tomen en la actualidad tendrán un impacto duradero en el futuro de España, la UE y el mundo entero.

¿Te gustaría aplicar los criterios ESG dentro de tu organización ¡Te ayudamos! Dale clic para solicitar más información.

También puedes conocer todos nuestros Programas de Desarrollo, enfocados en mejorar los principios ESG adaptándolos a cada organización aquí.

By: Alejandra Rodríguez Aguas – Content Creator