Diez formas de conseguir un ambiente de trabajo más diverso e inclusivo

Un ambiente diverso e incluso es clave para mejorar el rendimiento de las empresas

Promocionar y mejorar la diversidad e inclusión en el trabajo es una iniciativa que muchas empresas están tomando últimamente y es algo que celebramos, pero aún queda mucho camino por recorrer.

El principal motivo para hacerlo es porque está bien, porque es lo correcto y porque estamos hablando de derechos humanos. Pero, más allá de eso, que siempre debe ser tenido en cuenta como lo más fundamental, hay muchísimas razones para desear un ambiente laboral inclusivo.

Un lugar de trabajo diverso, en términos de edad, raza, etnia, religión, capacidades físicas, educación, lengua, estrato socioeconómico, cultura, nacionalidad, orientación sexual e identidad de género brinda a las empresas una perspectiva mucho más abierta, que se traduce en diferentes puntos de vista, ideas e innovaciones.

Los estudios al respecto

La universidad de Harvard ha publicado en diversas ocasiones estudios sobre la importancia de la diversidad e inclusión para retener talento. Según la consultoría McKinsey’s las compañías que gozan de diversidad étnica y racial tienen un rendimiento un 35% superior al de sus semejantes. Por otro lado, el portal web Glassdoor concluyó en un estudio interno que un 76% de las personas que buscan empleo consideran que un ambiente de trabajo diverso es importante para aceptar o no un una oferta laboral. Además, el 63% de las personas activas consideraban que sus compañías debían ser más diversas.

Hay que matizar que diversidad e inclusión no son lo mismo, aunque son conceptos interconectados. La diversidad es el qué mientras que la inclusión es el cómo. La primera se focaliza en la constitución del capital humano de la empresa y la variedad de esta -género, raza, edad, sexualidad y un largo etcétera- mientras que la segunda lo hace en cómo esas distintas realidades encajan y se desenvuelven cómodamente en su lugar de trabajo.

Aquí te dejamos diez consejos para conseguir un ambiente laboral inclusivo y diverso:

1. Tener un equipo de Recursos Humanos diverso.

Conseguir la diversidad e inclusividad en un ambiente de trabajo depende, en gran medida, del departamento de recruitment, por lo que lo ideal es empezar por allí.

2. Entrenar al departamento de Recursos Humanos.

Que el equipo de HR tenga sensibilidad en este ámbito es algo primordial. Concienciar a los empleados sobre la importancia de la diversidad e inclusión es vital para que ellos luego apliquen esa línea de trabajo.

3. Contratar a un experto en diversidad.

Tener a una persona experta en la materia marcará la diferencia para llegar satisfactoriamente al objetivo. Su primera tarea deberá ser realizar un análisis completo de la diversidad de la empresa, posteriormente los datos resultantes del estudio serán clave para definir la estrategia a seguir.

4. Ser conscientes de la carencia de diversidad e inclusión.

Para mejorar en la materia es importante saber desde qué punto partimos. Así, podremos saber hacia adónde vamos. Sobre todo, es interesante evaluar al equipo directivo ya que la alta dirección de una empresa dice mucho de su cultura y valores.

5. Incorporar la diversidad en las políticas y prácticas de la empresa.

Que las líneas de actuación de la empresa tengan impregnadas de forma intrínseca una política de diversidad e inclusión será vital para poder llegar a ser, de verdad, una entidad diversa e inclusiva. No es solo concienciar a los empleados y especialmente al departamento de recursos humanos, es preciso incluso ir más allá y establecer en los mismos estatutos de la organización la obligación legal de apostar por la diversidad e inclusión.

6. Respetar las diferentes prácticas religiosas y/o culturales.

Una buena manera de conseguir que todo el mundo se sienta a gusto e incluido es hacerle ver que en la empresa se es consciente de sus inquietudes religiosas y culturales, respetando e incluso honrando sus fiestas o celebraciones.

7. Transparencia en los salarios.

En este informe de PayScale se muestra y analiza la brecha salarial existente entre hombres y mujeres, que incluso es mayor entre las personas racializadas. También hay diversos estudios que indican que la transparencia en los salarios acaba con tendencias racistas, como pagar menos a los empleados negros que desempeñan exactamente las mismas funciones que los blancos. Además, según la entidad Institute for Women’s Policy Research la brecha salarial entre géneros aumenta sustancialmente en las organizaciones que no hacen públicas las retribuciones.

8. Eliminar los sesgos en la selección de personal.

Incluso los recruiters más experimentados pueden tener sesgos que sean imperceptibles para ellos mismos, puesto que este fenómeno se da con frecuencia en el ser humano. Ser conscientes de esto es importante para poder combatirlo y tratar de ser lo más justos posibles a la hora de seleccionar personal.

9. Celebrar las diferencias entre empleados.

Invitar a los empleados a compartir sus orígenes y backgrounds socioeconómicos es interesante para crear comunidad, un intercambio de bagajes culturales sirve para enriquecer a todas las partes y unir más a las personas que lo hacen.

10. Establecer mecanismos para conocer la opinión de forma anónima.

Según la universidad de Harvard la mayoría de grandes empresas ya emplean políticas de diversidad, pero éstas, normalmente, no son efectivas. Conocer cómo se sienten las partes discriminadas es vital para afrontar el problema y muchas veces estas voces quedan silenciadas por miedo a perder el trabajo. Establecer líneas de actuación para estudiar hasta qué nivel las personas sienten que están en un ambiente inclusivo es una medida esencial para dar el siguiente paso.

Construir un lugar de trabajo diverso e inclusivo dependerá de un esfuerzo colectivo en el que todos los actores de la empresa –sobre todo los gerentes y el departamento de recursos humanos – deberán poner su granito de arena. Además, es un proyecto que no tiene fin, es continuo y siempre habrá margen de mejora. Posiblemente para la consecución de la tarea se requiera una reestructuración en varios aspectos de la estrategia de la entidad, pero merecerá la pena una vez se consiga.