Lo que preocupa a las empresas: inflación y talento

La inflación, la escasez de talento, la innovación tecnológica, la crisis energética y los problemas en la cadena de suministros son las principales preocupaciones de los altos cargos de las empresas estadounidenses.

A continuación, os traemos un análisis del siguiente estudio realizado por PwC, podéis encontrar el original aquí: Executive views on business in 2022: PwC.

En dicho informe de la consultora PriceWaterhouseCoopers se explica la situación de las empresas desde la visión de los altos ejecutivos. El estudio se basa principalmente en Estados Unidos, pero es extrapolable debido a la influencia que las tendencias estadounidenses tienen en el resto del mundo.

A escala global, una de cada cinco personas quiere cambiar de trabajo o está a punto de cambiarlo. Para la inmensa mayoría de directivos, la escasez de talento es el mayor problema y/o reto que afrontan las empresas en 2022.

Sin ir más lejos, el 77% de los ejecutivos afirma que la contratación/retención de talento diferencial es su motor de crecimiento más importante. Por otro lado, el 60% de directivos creen que la transformación digital es otra palanca de crecimiento de vital importancia.

Pero, si hablamos de riesgos inminentes, entran más factores en juego.

Si en el apartado “positivo” la captación de talento era vista como la forma más útil de hacer crecer a la empresa, en el “negativo”, también encontramos al talento como principal preocupación. Prácticamente la mitad de los altos ejecutivos (48%) creen que retener y captar personas con altas capacidades es el mayor peligro que afrontan las empresas, entendiendo “peligro” como la falta de posibilidad de captarlo y, por tanto, sufriendo una desventaja competitiva que puede llevar a la ruina a la entidad.

Otros temas que preocupan mucho a los directivos son los siguientes:

-Problemas con la cadena de suministros (32%).

-Nuevas variantes del COVID-19 (29%).

-Políticas de regulación para el cuidado del medio ambiente (29%).

-Quedarse atrás en los cambios de los modelos de negocio (28%).

Además, la inmensa mayoría de ejecutivos dan por hecho lo siguiente:

-El COVID-19 se establecerá como un mal endémico y dejará de ser considerado pandemia (69%).

-La inflación continuará muy elevada cuando empiece el 2023.

-Las compañías necesitarán aumentar los precios de sus bienes y servicios en 2022.

– El gobierno ambiental, social y corporativo y la sostenibilidad serán críticos en el largo plazo para las empresas.

Por otro lado, el informe también destaca en qué están invirtiendo más las empresas punteras de los Estados Unidos de América.

Sus inversiones más potentes son en las siguientes materias:

-Contratación y retención de talento (60%),

-Transformación digital e iniciativas relacionadas (59%).

-Desarrollo de nuevos productos en respuesta a los cambios en las tendencias de consumo (50%).

-Mejoras en la agilidad con la que funcionan las operaciones de la empresa, teniendo en cuenta el turbulento entorno actual (46%).

-Mejorando la resiliencia de la cadena de suministros, en previsión a un futuro incierto (41%).

-Búsqueda de fusiones con otras empresas o entrando en alianzas empresariales (41%).

Estos son los datos más relevantes, ¿qué podemos sacar en claro si los tenemos todos en cuenta?

La escasez de talento es un problema muy grave. El cual está relacionado con el fenómeno de La Gran Renuncia, os hablamos sobre esto aquí.

Por otro lado, la mayoría de empresarios se han resignado ante el COVID-19, lo ven como algo que ya formará parte de nuestro día a día y habrá que convivir con ello y adaptarse.

La ferviente revolución digital y la transformación que comporta sirve para aumentar la agilidad de las empresas. Aunar esta tendencia con la eficiencia fiscal y las estrategias de precios es una prioridad para muchas empresas. Este cambio es remarcable, teniendo en cuenta que en el pasado las corporaciones se basaban más en objetivos funcionales específicos.

Dicha transformación digital aumenta la agilidad en medio de la preocupación por las regulaciones tecnológicas y de datos. A su vez, también crece la preocupación de las organizaciones respecto a las regulaciones tecnológicas y de datos.

Los riesgos en la cadena de suministros son elevados, estando esta sufriendo mucho debido, en parte, a la escasez de trabajadores y a la crisis energética. La guerra de Ucrania ha contribuido, también, a incrementar la gravedad de esta situación.

¿Por dónde pasa el futuro de las empresas?

Dejando a un lado la vertiente económica y de rendimiento que ya hemos mencionado; innovación tecnológica, nuevos modelos de negocio, captación de talento… encontramos otra, la social, que también será muy importante.

El mañana de las empresas pasa por tener un propósito, por aportar a la sociedad de forma positiva. Los tiempos en los que las corporaciones podían hacer y deshacer a diestro y siniestro sin tener a nadie que les pusiera límites, van quedando atrás. Es evidente que este será un proceso largo, una carrera de fondo. Pero se llegará a ello. Asuntos como el cambio climático o la diversidad, equidad e inclusión, (DE&I) han llegado para quedarse. No debemos quedarnos atrás.

Por: Sergio López Esteban – Content Creator

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